Una visita inesperada [Alma]

Me encontraba caminando por mi lugar favorito en todo Hogwarts, El Bosque Prohibido... Alli se podian encontrar, cosas realmente asombrosas, ademas, que era un lugar, muy temido, por la gran mayoria de los alumnos...
¿Porque habia decidido ir alli?, muy sencillo, ya habia terminado, todo lo que tenia que hacer, ademasm, de haber estado practicando, varias cosas en el dormitorio, y como ya no habia nada mas que hacer, decidi caminar por estos lugares...
Todo el dia, habia sido realmente aburrido, solo escuche a los profesores, que hablaban cada vez ams, y mas, y me cruse a mi odiosa hermana, Alma, unas cuantas veces etre clase y clase...
Una vez, en el corazon del bosque, decidi detenerme, y sentarme en un tronco de arbol que se encontraba caido, saque mi varita, mira a mi alrededor, asegurandome de que no hubiera nadie, y comenze a hacer algunos de los hechizos que habia estado practicando en el cuarto, los cuales, no estaban permitidos, en Hogwarts...

Iba caminando tranquilamente por el bosque, tan serena y tan solitaria como nunca había estado en toda mi vida. Me sentí sola, y un viento frío recorrió mi espalda. Algo no andaba bien... en general, sólo sentía éso cuando tenía a Cassandra, mi hermana plástica, cerca de mí. Me había divertido en todo el día, pero ahora mis amigos dormían, y yo sin embargo no podía. Odiaba admitir que estaba asustada, pero la verdad es que sí lo estaba. Ni modo, dí la vuelta, hacia el corazón del bosque, y cuando me metí en él, ví a alguien que me llamó la atención, sólo pude gritar:



-¿¡Tú!? -exclamé, asombrada de ver a tal 'intento' de persona, allí. -

Escuche que alguien gritaba, acto reflejo, gire mi cabeza, para ver quien habia sido la persona, que me habia sacado, de mi "Pequeña Practica".
Al girarme, no distinguia bien de quien se trataba, debido a que estaba oscuro, no queria que vieran mi rostro, ya que, si era un maestro estaria en graves problemas...

Si, yo...¿Que quieres? grite hacia las sombras, sin estar copmpletamente segura, hacia quien lo hacia...

-Explicarme qué es lo que haces en la escuela, cuando bien has dicho que jamás retomarías estudios, todo para ayudar al resto de la familia.


¡No podía creerlo! Cassie allí, mi vida se acabaría rápidamente. ¿Qué podía hacer? Enfrentarla, o simplemente hablar, como siempre había hecho a la hora de encarar a mi hermana 'adorada'. Creo que si no fuera por ella, por mi hermano Marko y por mi padre, mi vida sería inusualmente perfecta.

Uff... haber sabido que eras tu...dije con un suspiro... y al oir lo siguiente agregue¿Te importa? y luego me acerque a ella, a mi pequeña hermana, Alma...
Luego de un momento, comenze a percatarme, de que ella era una Gryffindor... ¿Porque no lo habia dicho?... o tal vez, si lo habia hecho y yo no habia deseado escucharla. Pero fuera cual fuera la razon, no pude evetir relojearla de ariba a abajo, y claramente, se notaba, que ella llebaba, la tunica de una Gryffindor...

¿Desde cuando eres uan leona? dije mirandola con asco y desprecio. Jamas en la vida, habia pasado que una Ryddle, sea una Gryffindor...
Sabia que esta se traia algo entre manos... me dije para mi misma....

-No es tan extraño que seas Slytherin... me lo imaginaba. Importa bastante lo que ocurra, Cassandra. ¿Hasta cuándo piensas seguir así con tu vida? -se lo dije de manera que entendiera. Quizá no había sido tan clara. Pero estaba orgullosa de ser una Gryffindor, éso estaba asegurado. Entonces, lo admití: - Soy una leona desde que el sombrero me seleccionó para Gryffindor, y estoy claramente orgullosa de serlo.

Pienso seguir asi con mi vida hasta que muera... en casa, todos estan mas que bien, por lo que decidi volver... ¿Es que acaso te molesta mi presencia? dije con un tono que, hacia parecer, que cada una de mis palabras, era una pisca de ponzoña, trantando de hacer efecto sobre mi victima...
Al escuchar el resto rei...
No puedo creer, que estes orgullosa, de pertenecer a esa casa... ¿Tu eres conciente de lo que dices? dije mirandola a los ojos y tomando mi varita con fuerza...

¿Como podia decir eso?¿Estaba orgullosa de ser una leona? pense, todo daba vueltas, aunque aun asi, mantube mi postura, frente a ella, sin quitarle los ojos de encima, y enviando las confuciones a un lugara muy alejado de mi mente...

-No creí que aparecieras, éso es todo. -luego respondí a su pregunta- Estoy perfectamente consciente de lo que estoy diciendo, me enorgullezco de no ser como tú... o... como mis demás familiares.


Temblé al decir lo último, pero sentía un irremediable valor, que me terminaría costando algo, alguien que amara o quisiera con la vida... Cass no había llegado aquí por nada; ella me tenía una terrible misión, estaba convencida.

Sabes algo, me das asco... dije, aun mirandola, no podia creer que sea una sucia Leona... me repugnaba, esa idea...
Bien, ¿y que haces aqui?... Leoncita.... dije la ultima palabra, en forma de burla...

OfF: de veras que soy mala xD

Off: Éso ya lo sabía ... xD



-De manera que ahora te doy asco. De acuerdo, siempre te lo había dado, pero es peor ahora que sabes que soy buena persona. Sabía que lo dirías, Serpiente, -le dije, devolviendo el apodo, pero con su casa: - aquí tengo amigos, que me quieren y a los cuáles quiero. Así soy feliz...

Si, me das mas asco, que nunca... En especial me dan asco tus tontos amigos... dije riendo...
Ohh.. yo tambien soy muy feliz aqui, tambien tengo a mis amigos... seguro los conoces... dije con una sonrisa macabra, que cada vez se ampleaba mas sobre mi rostro...

-¿Alexander? Que yo sepa, él también es amigo mío, y por lo que sé, el único mejor amigo real que tienes aquí dentro. Mis amigos, al menos tienen algo de honestidad, de lo que tú careces por completo...



Comenté lo último, realmente convencida de que respondería de mal modo:

Si, el es uno, pero me soprende que este con una leona. De todas formas, ya no me interesa hablar sobre mi vida privada... comente, con una sonrisa y al escuchar el resto rei...
Sabes algo, tus insultos, no me ofenden, en absoluto... Pero, en cambio, yo se que como tu eres muy ingenua, todo lo que yo te diga, aunque no sea a grado sumo, te ofende y lo mejor aun te duele... esto, lo pronuncie en tono altanero...

-No puedes ofenderme, -repliqué, al ver su altanera actitud hacia mí, - aprendí desde niña a soportar todo lo que me dijeras, pero sí: por lo menos tengo sentimientos, no soy una roca. Lloro si debo llorar, si debo reír, río. Y algunas veces, creía que en verdad llevábamos la misma sangre. Pero parece que estaba equivocada...

Puede que si te allas equivocado y mucho.... Yo no me paresco ni una pisca a ti... dije mirandola de reojo, puesto que me habia dado vuelta y con mi varita en mano apunte a un pequeño insecto que por alli pasaba...

Cruciatus... Grite... aunque no lo suficientemente fuerte, como para que otra persona que no fuera Alma, me oyera...

Viste eso hermanita... ¿No es asombroso? dije sonriendo, mientras seguia torutrando al pequeño insecto...

-Ya me dí cuenta... -solté, y aparté mis ojos marrones por un instante de Cass. Al minuto, fijé la vista en un insecto pequeño, al que torturaba.- Lo estoy viendo, y no es asombroso... ¡es repulsivo, horrible! Mejores cosas hay en la vida que torturar criaturas inocentes, puedo asegurarlo...




¡Pobre e indefensa criatura! Me daba yo bastante cuenta, de lo que mi "hermana" podría hacerles a todos... temí prontamente por mis amigos, y por el resto de estudiantes, profesores. Mas no temí por mi propia vida.

-No te envidio, Cassandra. No podría envidiar lo que jamás querré poseer. Son innumerables las cosas que puedes hacer, exceptuando éste comportamiento macabro. -luego escuché el resto de su frase,- no, yo jamás sería igual a tí y al resto de la familia. Yo soy una buena persona, y como ya ves, lo afirmo sin miedo.

Claro Alma, sigue engañandote a ti misma, no me molesta... dije como si nada, sin darle importancia a lo que ella habia dicho, puesto que tampoco me importaba mucho que digamos.
Al escuchar el resto, negue con la cabeza Eso, es lo que tu dices ahora, pero ya veras luego como las cosas cambian, y tu sola te daras cuenta que la vida que creias que te gustaba, la detestas. Y yo que tu, si tendria un poco de miedo... dije mirandola a los ojos...

-No temo por mi vida, la daría por proteger a mis amigos. A las personas que sí son mi familia, que se comportan como tal. -respondí, viendo la actitud petulante de mi "hermanita"- Que darían bastante por mí, como yo por ellos. A quiénes sí aprecio bastante y me aprecian, me escuchan, me comprenden. Por éso les devuelvo el favor -añadí, mirando a Cassandra,- porque son la familia que hubiera querido tener.

Tengo una sola palabra, tanto como para tus "amigos", como para ti TONTOS... dije, riendo como si lo que hubiera dicho hubiera sido un gran chiste Ademas, hay mucha gente que moriria por ser un Ryddle, y tu, querida... lo desperdicias... Que estupida... dije caminando por entre los arboles...

-Estúpida resulta quien ignora las cosas buenas de la vida... -murmuré, dando la vuelta y enfilando hacia el castillo. He de admitir que todavía quedé más nerviosa que antes, pero todo este mal se acabaría pronto. Haría lo posible para que así fuese-